En medio de un ambiente económico internacional inestable y tensiones comerciales, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) de México ha revisado su estimación para el tipo de cambio del peso frente al dólar, elevándola de 18.5 a 20 pesos por dólar para el cierre de 2025. Este ajuste, presentado en los Precriterios de Política Económica 2025, refleja la cautela del gobierno ante un entorno global marcado por la incertidumbre en los mercados y las políticas comerciales restrictivas de Estados Unidos.
Un escenario de incertidumbre global
El nuevo pronóstico se enmarca en un contexto internacional complejo, donde las fluctuaciones en los mercados financieros y las tensiones en las relaciones comerciales han generado preocupación en economías de todo el mundo. La SHCP ha considerado que factores como la imposición de aranceles por parte de Estados Unidos y las condiciones inestables en la economía global pueden ejercer presión sobre el valor del peso, obligando a ajustar las expectativas de cambio.
Implicaciones para la economía mexicana
El aumento en la proyección del tipo de cambio implica que, de mantenerse la tendencia, el costo de las importaciones podría elevarse y, a su vez, impactar en el precio de bienes y servicios para los consumidores. Además, este ajuste podría tener repercusiones en la inversión extranjera y en la competitividad de las empresas mexicanas, en un momento en que el país busca consolidar su crecimiento económico.