En declaraciones que han generado controversia y debate en el ámbito internacional, el expresidente Donald Trump celebró públicamente la extradición de 29 narcotraficantes mexicanos a Estados Unidos, calificándola como uno de los mayores logros de su política de aranceles. Trump afirmó que la medida busca fortalecer la seguridad y el comercio, y agregó: “Nos quieren hacer felices”, en referencia a la supuesta satisfacción de la población estadounidense.
Contexto de la extradición
La reciente operación que dirigió a la extradición de 29 altos mandos del narcotráfico, procedentes de México, se enmarca en una serie de acciones coordinadas entre autoridades de ambos países. Estas forman parte de un esfuerzo más amplio del gobierno de Estados Unidos para combatir el flujo de drogas ilegales y mejorar la cooperación en materia de seguridad fronteriza. Según informes, la operación se realizó en conjunto con agencias federales y contó con información de inteligencia que permitió desarticular importantes redes criminales.
La política de aranceles como herramienta de presión.
Durante una rueda de prensa, Trump vinculó la extradición al éxito de su política de aranceles, argumentando que estas medidas económicas han permitido presionar a gobiernos extranjeros para que cooperen en la lucha contra el narcotráfico.
Implicaciones futuras
La celebración de Trump apunta a reforzar la narrativa de su administración en materia de seguridad y comercio, y podría influir en futuras negociaciones con México y otros socios. Sin embargo, este posicionamiento también podría agravar las tensiones diplomáticas.