La CIA ha incrementado los vuelos de drones no tripulados dentro de México con el objetivo de espiar a los cárteles del narcotráfico. Según informes de The New York Times y CNN, estos vuelos, que comenzaron durante la administración de Joe Biden, se han intensificado bajo el gobierno de Donald Trump, quien designó a estos grupos como organizaciones terroristas.
Los drones MQ-9 Reaper han sido utilizados para identificar laboratorios de fentanilo y rastrear movimientos criminales. Sin embargo, la medida ha generado tensiones diplomáticas entre ambos países. La presidenta Claudia Sheinbaum ha minimizado el espionaje, señalando que forma parte de una campaña mediática, mientras que Washington insiste en que esta vigilancia es clave para la seguridad regional.
Las autoridades mexicanas aún no han aclarado si permitieron estos vuelos, pero la cooperación en seguridad sigue siendo un tema de fricción en la relación bilateral.
