
El expresidente Donald Trump anunció una postergación de 90 días en la implementación de nuevos aranceles a productos mexicanos, medida que abre una ventana de negociación entre ambos países en medio de tensiones diplomáticas y comerciales.
¿Qué implica esta prórroga?
Durante estos tres meses, se mantendrán los aranceles ya vigentes:
- 25% a autos y autopartes
- 50% a productos como acero, aluminio y cobre
Esto brinda a México un respiro para seguir negociando, aunque no elimina la presión sobre sectores clave de exportación.
México elimina barreras y abre diálogo
Como parte del acuerdo provisional, México accedió a eliminar diversas barreras no arancelarias que afectaban a exportaciones estadounidenses, particularmente en los sectores agrícola y tecnológico.
Las autoridades mexicanas informaron que buscarán un acuerdo comercial renovado que garantice equilibrio en las condiciones sin ceder soberanía económica.
Tensiones comerciales y visión política
Esta decisión llega en un contexto de presión bilateral por temas como la migración, la energía y las cadenas de suministro. Trump ha endurecido su discurso proteccionista, mientras México intenta proteger su industria sin romper con su principal socio comercial.
¿Una táctica política?
Expertos coinciden en que Trump está utilizando esta prórroga como herramienta de presión negociadora, mostrando voluntad de diálogo sin renunciar a su línea dura. México, por su parte, intenta proyectar firmeza, pero también apertura a acuerdos.